jueves, 23 de febrero de 2017

“Logan” (2017) – James Mangold


Sinopsis: Es el año 2029. Un retraído y abatido Logan pasa los días bebiendo sin parar, escondido en una remota parte de la frontera mexicana, ganándose algo de calderilla como conductor de alquiler. Sus compañeros en el exilio son el marginado Caliban y un enfermo Profesor X, cuya singular mente sufre ataques y convulsiones cada vez más graves. Pero los intentos de Logan por ocultarse del mundo y de su legado llegan a un abrupto fin cuando aparece una misteriosa mujer con una petición urgente: que Logan guíe a una chica extremadamente joven y muy extraordinaria hasta un lugar seguro. Las garras le vuelven a brotar inmediatamente a Logan cuando tiene que enfrentarse a fuerzas oscuras y a un villano de su antiguo pasado en una misión a vida o muerte, una misión que situará a este guerrero, ajado por el tiempo, en el camino hacia el cumplimiento de su destino.


Comentario:

Casi dos décadas. 17 años,  para ser más exactos. Ese es el tiempo que lleva Hugh Jackman encarnando al mutante de las garras de adamantium. Y no es moco de pavo.

Puede que al principio muchos (lo más comiqueros) criticaran su elección. Y por algo tan estúpido e insignificante como su estatura. Pero a día de hoy no creo que haya nadie que ponga en duda el hecho de que el personaje le pertenece por derecho propio. 

Lobezno es Hugh Jackman y Hugh Jackman es Lobezno. El actor lo ha hecho todo suyo desde el comienzo. Desde su primera aparición hasta la última, en un total –si las cuentas no me fallan-de hasta 9 ocasiones, entre las películas que conforman la primera trilogía hasta las precuelas y sus secuelas, pasando por su propio spin-off y sus correspondientes continuaciones hasta la fecha de hoy.  El actor se ha dejado cuerpo y alma en el personaje, y en esta ocasión vuelve a demostrar que el listón que deja está muy pero que muy alto. 

Esta tercera y última entrega de las andanzas en solitario del mutante más querido de la franquicia, pone punto y final a la –desigual-  trilogía. Una secuela que sabe a amarga despedida, y no por el resultado, ni mucho menos, sino porque con toda seguridad sea ésta la última vez que veamos al actor sacando las garras.

Puede que este spin-off no empezara con muy buen pie, pero todo cambió en el momento en el que Mangold asumió las riendas. “Lobezno Inmortal” fue una entrega muy digna para quien esto escribe,  y esta tercera no se queda atrás. De hecho, la supera con creces. Y no al estilo de Bryan Singer, que con cada entrega suma en espectacularidad y toneladas de CGI para terminar restando en calidad. Aquí la cosa no funciona así, porque Mangold emplea un arma todavía más poderosa: el corazón.


“Logan” nos sitúa en un mundo futuro en el que los mutantes son cosa del pasado. Apenas queda rastro de ellos salvo, por supuesto, de nuestros estimados Lobezno y Xavier, y alguno que otro más.
En este panorama, y con un Xavier enfermo, no es de extrañar que tengamos al bueno de Lobezno más hastiado que nunca. Un Lobezno viejo y cansado, que pasa los días vaciando botellas (y botellines) de alcohol para intentar paliar el dolor de los recuerdos del pasado, de aquellos que ya no están. El dolor que le ha arrastrado a la decadencia, a la desidia y a la más desoladora amargura. Un dolor que ha infectado su mente y que parece arrastrarlo hacia el abismo. Pero es entonces que aparece un pequeño y punzante rayo de esperanza. Una cría mutante que volverá a despertar en Lobezno ese lado paternal que ya vimos una vez aflorar con Pícara, y que aquí servirá de nuevo para dictaminar sus decisiones y las acciones que de éstas dependan.

La trama se construye a modo de ajetreada road movie, con claras reminiscencias al western, género que, podemos afirmar, apasiona a Mangold. No ya sólo por el tono -tirando más a crepuscular- que distingue a esta película, sino también por esa especie de guiño constante y de paralelo desarrollo que establece con “Shane” (aka Raíces profundas), cinta que protagonizó Alan Ladd allá por el ’53 y de la que aquí se sirve Mangold, claramente influenciado por el contexto, para extraer unas cuantas gotas cargadas de sabiduría atemporal. 

No olvidemos tampoco que el director es artífice de uno de los mejores y más satisfactorios remakes de la pasada década: “El tren de las 3:10”.

Con todo, la última cruzada de Lobezno nos invita a un viaje oscuro y amargo cuyo trayecto está evocado a la habitual redención del héroe. En este caso, la de un hombre que parece haber perdido las ganas de vivir y de luchar. Ganas que volverán con la fuerza de un huracán en el momento en el que la vida de una niña y el futuro de toda una nueva generación de mutantes recaiga cual losa sobre sus curtidos hombros. 

Con “Logan”, Mangold aporrea los tópicos del género y los desafía con altas dosis de feroz violencia y de desgarradoras pinceladas dramáticas. Deconstruye las constantes de lo que entendemos por una película de superhéroes, así como otros han hecho antes. Y puede que por el camino recaiga en tópicos de otros géneros, es inevitable, y puede también que a algunas mentes más obtusas les disguste lo que vean, pero su osadía, independientemente del resultado, bien merece un aplauso en estos tiempos que corren.

Cierto es que la saga de Lobezno ha sido bastante irregular, y que el pifostio cronológico que tiene montado el estudio entre unas y otras no ha ayudado en nada, pero no me tiembla el pulso al afirmar que sin duda estamos ante una de los mejores títulos de toda la franquicia. Jackman puede presumir de despedirse de Lobezno por la puerta grande y con las garras bien ensangrentadas, como muchos pedían desde hace tiempo.


VALORACIÓN PERSONAL: 


5 comentarios:

Chacal dijo...

Cuando nos vimos el otro día en el pase, esta es la crítica del otro compañero con el que te dije que me crucé http://docpastor.com/logan/

Pliskeen (David Ribet) dijo...

No lo conocía, pero veo que también le gustó la película :)

¡Saludos!

Patrick Bateman dijo...

Tenía tu crítica guardada en el lector desde la fecha en que la publicaste, pero antes de verla no he querido leer absolutamente nada que pudiese condicionar mi opinión, para bien o para mal.

Lo que comentas de Pícara no lo he pensado, es un buen apunte por tu parte. Para mí, el film ha sido jodidamente genial. Esa prometedora versión del personaje que prometía el trailer, está excelentemente desarrollada. Me ha recordado a lo que hizo Stallone en John Rambo.

Saludos.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Normalmente publico las críticas la semana del estreno, pero llevaba un tiempecito sin actualizar y la coloqué antes xD

En cualquier caso, haces bien porque siempre es mejor leerlas después de ver la película en cuestión.

La verdad es que Mangold nos ha entregado al mejor Lobezno. Una despedida del personaje dura y emotiva.

Saludos ;)

Patrick Bateman dijo...

Pues sí, el final es de tragar saliva.

Saludos