martes, 3 de junio de 2008

"Doomsday" (2008) - Neil Marshall


En el 2002 Neil Marshall debutaba con la simpática “Dog Soldiers”, otra vuelta de tuerca al subgénero licántropo y película con la que el director ya apuntaba maneras. Tres años más tarde llegó “The Descent”, una brutal y claustrofóbica cinta de terror survival mediante la cual Marshall se mostraba como un nombre a tener en cuenta dentro del género fantástico.

Niguna de las películas citadas alcanzaba la cifra de 10 millones de dólares de presupuesto, y aunque su última película ronde los 35 millones (una nimiedad comparada con los blockbusters hollywoodienses), se puede decir que Marshall sigue afincado muy convenientemente dentro del cine de bajo presupuesto (o serie B).

En “Doomsday” se nos cuenta la historia de un mortífero virus bautizado como “Reaper” que está devastando la población del Reino Unido. En cuestión de días la pandemia ha recorrido casi todo el país y son millones las personas afectadas, especialmente en Escocia, foco del virus.
Como medida para contener su avance, el gobierno declara un estado de cuarentena que consiste en construir enormes murallas alrededor de Escocia y levantar controles por carreteras, puertos, etc., de modo que el país quede aislado y nadie pueda entrar ni salir de él. Así es como empieza lo que podriamos llamar el “sálvese quien pueda”.

Veinticinco años después, cuando el virus parecía haber desaparecido, éste brota de nuevo en un Londres superpoblado e incapaz de contener la amenaza. La única posibilidad que tiene el gobierno es mandar a un equipo de especialistas fuera de las murallas para encontrar el antídoto que presumiblemente desarrolló el Dr. Kane hace ya más de dos décadas. Al frente de dicho equipo estará la oficial Eden Sinclair (Rhona Mitra), cuyo obetivo, además de encontrar a Kane o el antídoto (lo que llegue primero), será intentar que todos vuelvan sanos y salvos de tan peligrosa misión.


Algo que ya quedaba pantente en el trailer y que se confirma tras el visionado de la película, son sus similitudes con otras cintas de futuros apocalípticos. Lejos de disimularlo, Marshall lo que ha pretendido es ofrecer un claro homenaje a aquellas películas setenteras y ochenteras en las que el mundo se ha convertido en un lugar decante y bárbaro dónde impera la ley del más fuerte.

Para ello no ha dudado en hacer un popurrí de films tan emblemáticos como “1997: Rescate en Nueva York” de John Carpenter o “Mad Max” de George Miller, aderezado todo con una pizca de “28 semanas días/semanas después. Así, por un lado tenemos el protagonista a modo de antihéroe -en este caso, antiheroína-, la misión de vida o muerte con intereses humanitarios y políticos de por medio, ciudades devastadas y repletas de restos humanos, y violentas tribus urbanas surgidas tras el declive.


El inicio del film, enfocado en la evacuación de las ciudades, recuerda sobremanera a la reciente “Soy leyenda”, mientras que el resto casi podría considerarse una revisión moderna (y con “infectados”) del film de John Carpenter. Sin ir más lejos, un personaje del equipo de Sinclair se apellida como el citado director. A eso hay que añadirle una premisa argumental muy similar y una protagonista que comparte rasgos en común con el gran Serpiente Plissken (parche incluído, aunque sólo sea por unos minutos). Incluso tenemos un combate a vida o muerte de la prota contra un guerrero y que sirve de entretenimiento para las masas; algo que ya ocurría en el film de Carpenter, sólo que allí Plissken peleaba en un cuadrilátero de boxeo mientras que aquí Sinclair lo hace en algo más parecido al Coliseo romano (aunque en un ambiente medievo)

La búsqueda del antídoto se complica cuando aparece en escena un grupo de supervivientes del virus y que ahora pululan por la “zona caliente” armados hasta los dientes, atabiados como si fueran punks postmodernos (he aquí la referencia a la trilogía de Miller) y gastando muy malas pulgas. Por supuesto, nuestra protagonista les hará frente sin pestañear, lo que proporcionará al espectador unas cuantas dosis de acción a base de violentas y sangrientas peleas, y persecuciones de lo más trepidantes y jugosas.

Podriamos decir que una de las virtudes de esta película, y en mayor medida, de la filmografía de Marshall, es el explícito tratamiento de la violencia y de la sangre, rehuyendo así de la dañina y cada vez más habitual costumbre de suavizar (o censurar, como gusteis) todas las películas comerciales bajo el amparo de la calificación PG13 (osease, sacar más pasta abordando a todos los públicos)
Aquí se nos muestran decapitaciones, amputaciones y ejecuciones en todo su “esplendor” y con todo lo que eso conlleva, es decir, salpicaduras de sangre que harán las delicias del aficionado al gore y que supondrán la inmediata desaprovación del público más sensible y/o puritano. Si bien hay que decir que en determinados momentos el director también es capaz de recurrir a la elipsis con idénticos y eficaces resultados.


Desgraciamente, el punto débil (y a veces a favor) de la película es precisamente esa clara referencia a las películas anteriormente señaladas.
Esta claro que Marshall cuenta con la comicidad del espectador (en mi caso eso no supone un inconveniente) pero el problema es que a lo largo de la película sentimos una permanente sensación de déjà vu que se acentúa aún más por la poca originalidad de la historia y por el intento de mezclar demasiadas películas en una.

Por ejemplo, hacia la mitad de la película, el ambiente postapocalíptico deudor de Mad Max se transforma en algo retro-medieval, recordándonos -y no para bien- a la casposa “Beowulf” (la de Christopher Lambert), producción en la que precisamente actuaba Rhona Mitra.
Este tramo resulta bastante chocante y desentona enormemente con el resto. Y es que lo suyo hubiera sido decantarse por un estilo y ambientación en particular y no querer mezclar tantas elementos en un film cuya trama no permite mucha variedad.

Pese a ese desafortunado inciso, la historia sigue por su cauce, de nuevo emulando la saga de George Miller con una espectacular y emocionante persecución automovilística que supone ya el tramo final de la película y también uno de los platos fuertes de la misma. Es aquí donde el director vuelve a demostrar un perfecto dominio de la cámara, buscando ángulos imposibles y coreografiando una persecución bestial en todos los sentidos (aunque también es cierto que puede llegar a marear)

Sobre las interpretaciones no hay mucho que decir. Rhona Mitra cumple como dura heroína, papel que es más físico que interpretativo. Recuerda a la Sarah Connor/Linda Hamilton de “Terminator 2”, siguiendo también un poco la estela dejada por otras estoicas féminas como la Alice/Milla Jovovich de “Resident Evil”.

Los rostros más conocidos del reparto son Malcolm McDowell y Bob Hoskins, cuya interpretación es de esas de puro tramite para cobrar el cheque, es decir, se limitan a aparecer unos minutos en escena de forma eficiente y poco más. Desde luego ninguno de los dos será recordado por estos personajes.

El resto está meramente correcto y tan sólo destaca por encima de todos un adecuadamente histriónico Craig Conway, el punkie zumbado que persigue a Sinclair la mayor parte del metraje.


En definitiva, una película de acción para pasar el rato sin comerse mucho el tarro, con multitud de referencias a otras películas, unas dosis de gore y acción en cantidades industriales.

Eso sí, todo realizado a la antigua usanza y sin apenas utilizar el ordenador (sólo en casos puntuales). Vamos, que aquí lo que explota lo hace de verdad y los especialistas se ganan el sueldo a base de bien. Y en estos tiempos que corren, donde lo digital impera por encima de lo artesanal, se agradece que alguien marque la diferencia, aunque eso suponga menos espectadores en la sala. A fin de cuentas, ese aire a serie b que destila la película nos encadila tan sólo a unos pocos, y precisamente es a estos pocos a quien va dirigida esta producción futurista de modestas pretensiones.

De Marshall quizás podríamos haber esperado/exigido más, pero de seguro que de haber sido otro el que llevara a cabo esta gamberrada, el resultado se hubiese convertido en un despropósito intragable.


Valoración personal:

14 comentarios:

Chacal dijo...

Más o menos tu valoración coincide con la que ya puse yo en su día en mi blog.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Que yo recuerde sí :)

Entretenida y ya está. Con un guión más currado (ideas nuevas y no tanto homenaje) hubiera podido ser mejor película.

Saludos ;)

Unknown dijo...

Me llama mucho la atencion verla! Sobretodo que Marshal me impresiono mucho con El Descenso...(La cual fui a ver por casualidad). De esta tambien sorprende que los bicharejos no sean CGI lo que se le agradece mucho y contribuye a esa sensacion de miedo que pocas pelicuasl logran transmitir y menos con bichos CGI( Vease Soy Leyenda). No es que este en contra del CGI ( hay peliculas que lo merecen) pero es que se añora como tu dices explosiones reales y hombres disfrazados de bichos que dan miedo.

Por el lado mas light de mi comentario: Que buena esta la Rhona Mitra no??? De ella recuerdo una breve pero jugosa escena en la para mi infravalorada " El hombre sin Sombra".

Saludos!

john mcclane dijo...

Habia leído comentarios similares al tuyo acerca de esta cinta y cuyos detractores comentan el gran número de características que Marshall "tomo prestadas" de cintas como "Mad Max" o "Escape de Nueva York". Por ahí pasa la discusión si este trabajo es simple robo o tributo. Independiente de eso, espero que sea una cinta que cumpla con entretener, que supongo que fue la meta concebida por el director.

Saludos y muy buena reseña.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

sergio alejandro,
Totalmente de acuerdo en lo referente al CGI.
Considero que el ordenador es una herramienta muy útil, pero hay que utizarlo con moderación y saber cuando es realmente necesario.
Los bicharracos de The Descent impresionan porque están ahí, son palpables y tienen un maquillaje acojonante. Los de Soy Leyenda no te transmiten nada y encima en aquella película estaban bastante mal hechos.
CGI sí, pero con criterio.
En esta película usa muy poco y se agradece, porque la combinación de técnicas digitales y técnicas artesanales es perfecta, y así debería ser con todas las películas (y así debería haber sido en la cuarta de Indy)
Otra cosa son películas como Transformers o Iron Man, que sin ordenador no existirían o de existir, serían muy cutres.

Rhona Mitra está muy buena :D
Aquí tiene unos quilitos menos porque pasó varios meses poniéndose en forma en el gimnasio. Hacia el final de la película hay un plano de se trasero increíble-ble! :P
La chica mala de la película (la pechugona de la foto del post) tp está nada mal ejeje

fantomas,
Se nota que Marshall es fan de un tipo de cine en particular y con esta película ha querido rendirle homenaje. Lo malo es que se ha quedado simplemente en eso. Aporta algunos detalles interesantes, pero en general la historia no es para nada novedosa y ahí está su problema, que resulta altamente previsible. Además de querer mezclar demasiadas películas en una.
De todas formas, resulta una película de acción entretenida y visualmente muy conseguida, así que al final Marshall consigue sus objetivos: entretener y homenajear.
Podría haber sido mejor, eso sí.

Copia u homenaje? Que cada uno juzgue por su cuenta. El mismo debate podríamos tener en base a un tal Tarantino xD

Saludos ;)

Oscar dijo...

Me quedo con THE DESCENT.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Desde luego, de las tres, The Descent es la mejor. A la espera estoy de sus próximos proyectos :)

Saludos ;)

Rodi dijo...

Vi ayer esta peli y la verdad, es todo lo que esperaba de ella, una pelí al más puro estilo 80's, llena de acción y gore. Además con guiños nada disimulados a "Mad Max" y "1997: Rescate en Nueva York".

Coincido contigo que la parte mediaval chirría un poco, pero se le perdona por ser una genuina serie b.

Ya espero con ganas una nueva película de Neil Marshall.

Saludos.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Mientras Marshall se siga moviendo dentro de los parámetros de la serie B, para mí seguirá siendo un director al que tener muy en cuenta.

Lo malo de este film es que aporta nada nuevo y es muy previsible, pero por lo demás es una disfrutable película de acción.

Saludos ;)

Igor Von Slaughterstein dijo...

Tengo ganas de ver esta peli, aunque creo que no se ha estrenado en mi ciudad. ¿Fue ya el estreno y se me ha escapado? Las dos pelis anteriores del señor Marshall auguraban un buen futuro en el género.

Ah, y enhorabuena por el magnífico especial Indiana Jones. Imprescindible.

Saludos!!

Pliskeen (David Ribet) dijo...

En USA ya hace un tiempo que la película se estrenó y en España lo hará en Julio.

Aquí Marshall deja el terror a un lado para fabricar un film puramente de acción. Un cambio para nada malo, aunque bien podría haber sido mejor película.

Y gracias por las felicitaciones :)

Saludos ;)

Anónimo dijo...

A mí me dejó un sabor agridulce.

Por una parte me esperaba una película de terror (al ver su cartel y algunas imágenes) tipo "28días". Pero luego conforme la iba viendo parecía que no había un genero determinado. Existen momentos angustiosos, luego pura acción, sigue con muchos homenajes (no creo que sean plagios ni de coña) a otras películas y finalmente acabas con un cacao dificil de explicar a alguien que te pregunte de que va la película.

La escena del castillo la ví totalmente innecesaria y fuera de lugar. Y agradecí que algunos enemigos (ya sabes cual) fuesen despachados a la primera de cambio (lo que lleva el malo de la película en su coche -al final de la película- me hizo reir a carcajadas. Creo que sabes a qué me refiero :P).

Si tuviese que ponerle una nota (algo que no ya no hago desde hace mucho) le pondría un 6. Conforme pasa el tiempo creo que la voy aceptando más.

Pliskeen (David Ribet) dijo...

Yo tb me esperaba más, tanto por la temática como por quién la dirigía.

Creo que se lía demasiado en el megunje de homenajes y no ofrece nada nuevo e interesante. Como película de acción para pasar el rato funciona perfectamente, pero podría haber dado mucho más de sí.
Y sí, la parte del castillo sobra.

Yo le pondría exactamente la misma nota que tú: un 6 (quizás un 6,5 por lo buena que está Mitra y por la excelente persecución final xD)

Saludos ;)

Machete dijo...

Pues a mí la mezcla tan dispár me descolocó a la par que me encantó. Es genial, la mejor de Marshall, para mí.